martes, 9 de febrero de 2010



Tan silencioso como está todo esta noche, casi te creíste que estabas seguro. Tus ojos están llenos de sorpresas, no pueden predecir mi destino. Esperando bajo las estrellas hay algo que deberías saber. Los ángeles me rodean el corazón diciéndome que te deje marchar...
Casi quedas como un tonto esta vez. Dale gracias a todos los santos, escondes tu tristeza tras tu sonrisa y te guardas para tí tus corazones rotos y perdidos. Los pasos que das al filo de la cornisa son más altos de lo que parecen, pero ya he estado antes en esa cornisa asi que no te puedes esconder de mí.
Apuesto a que no pudo reconocer que aún me metí de cabeza en el juego...
Quién soy yo para criticarlo, de alguna forma saldré de ello y no te darás ni cuenta... desenmascarándote tras tu propio disfraz.
Es como si una y otra vez que me tiraras al suelo. Debería largarme...una y otra vez vuelvo por más, juego dentro de tu fantasía. Ahora se ha acabado, no puedes mentirme a través de tu sonrisa. He visto dentro de tus ojos. Ahora estoy sobria ya no me intoxicas más la mente
Ni el Diablo te reconocería, pero yo sí